Hola Mariana,
Nos da mucho gusto saber desde estas lejanías que ya estás en tu casa con todos. Qué buen regalo de Reyes para tí, tus papás, tus hermanas, Lilya y los demás!
Continuando con el viaje que hicimos al Desierto, te diré que hasta ahora me pongo otra vez a escribir porque hemos tenido unos días acelerados de trabajitos y trabajotes aquí en Khartoum Sudán, a pesar que por aquí NO se celebra nada de lo que nosotros sí, en especial en éstas épocas.
Mas por otro lado te comento que vemos a diario las carencias tan grandes, la escasa y a veces nula alimentación, la falta de escuelas y educación elemental, el retraso tan enorme en que vive la población de este país, que nos ha servido para NO sentir que nos faltan celebraciones luces regalos ni festejos.
Increíble mas todo esto nos ayuda a des-cosificarnos, a des-materializarnos y a aprender a vivir con lo que tenemos y en especial con lo que somos.
O sea que.. Arriba el corazón! bueno te va...
Aguas del Río Nilo... Aguas de Sudán...
Al otro día salimos temprano, después de un buen desayuno para todos en medio del silencio del Desierto con café y huevitos a la mexicana, cebollita jitomate chilitos verdes todo llevado y picadito por Sonia, para irnos a un lugar del Río Nilo llamado...x...
El paisaje lacustre aunado al fuerte calor, alentador y provocativo a tomar un buen chapuzón y salir fresco para continuar el viaje. Y bueno pos no dejamos la tentación pasar y aunque sea los pies, y luego la cara y luego... no pos ya vámonos porque están los guardias y guaruras echando unos ojos de 'algo' que desalentaron nuestro gusto por el frescor del agua...
Caminamos a orillas, en pequeñas salientes y sobre las rocas, hasta que en esas aparentes aguas indefensas los guardias encontraron pistas de cocodrilos! Y pos como que dale prisa al paso porque ya sentíamos al feroz veloz y agresivo animal encima de nosotros.
De ahí a caminar sobre lechos viejos, llenos de piedras preciosas redondas y como huevitos tallados por el 'mejor artífice' del Río Nilo, seguidos por hileras de palmeras y árboles que se antojaban verlos llenos de agua, rebosantes, llevando vida y alegría a las poblaciones que a través de los Siglos se han instalado en esos remotos lugares bañados por las aguas pródigas del Nilo. Mas NO, los lechos del histórico y caudaloso Río Nilo, ya no llevan agua a todos los lugares que hasta hace tan solo 40 ou 50 años lo hacían, según los lugareños.
Las áreas cada día más desertificadas.
Sin embargo, a pesar del calor, de la escasez de agua, del estar en medio 'de la nada'... no falta en ninguna población por pequeñita que sea, las mezquitas, pareciera que van en proporción al tamaño de la población; más pequeñito el poblado, más grande la mezquita... asimismo, más lejana la población, más mujeres cubiertas de 'burkas negras' y vestidas con guantes negros, medias gruesas negras, vestidos hasta abajo arrastrándose en la arena, y eso sí, enjoyadas en oro! desde jovencitas hasta adultas.. son como sectas raras de gente ultra-conservadora.. y ellas en negro obviamente contrastan con los hombres de blanco ..el opium de los pueblos..
Y bueno que aquí en esta lejanía del área del Desierto del Sahara inclemente y tórrida, hay tan solo un país que provee agua a la población en general, Sudán.
Para ello, a lo ancho y largo del país, se han puesto sin importar dónde, remansos a veces cubiertos con techumbres de ramas para que toda la población tenga acceso al agua, que al mismo tiempo se transforman en lugares de reunión. 2, 3, 4, 5, hasta 6 grandes jarrones de barro como los que nosotros usaríamos para las piñatas de antaño, soportados en simples bases de metal soldadas por los herreros locales que participaron en este remarcable proyecto. Pasa cada día un camión con agua NO limpia, mas al menos agua, a la que todos acceden para saciar la inquietante y perturbadora sed.
Enfrente de la casa donde vivimos hay 2 jarrones, llegan todo el día todo tipo de personas, niños de las escuelas, señores, viejos, todos se aproximan permanentemente a tomar agua y a veces a refrescar sus caras.
Bueno pues Mariana espero que disfrutes estas travesías por estas lejanas tierras que nunca imaginé estar... Sonia
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