Tengo muchas ganas de escribirte hace mucho y ya ves, apenas hasta ahora.
Parte de este atraso, aunque no quisiera que suene a justificante, es que también pretendía escribirte en el blog, pero le buscaba y buscaba y nada, se me hizo más difícil que un exámen final de química del algún año de secundaria. Bueno tu como excentaste todos, no entenderás a que me refiero.
Hoy me mando mi compadre "unas instrucciones" para escribirte al blog y finalmente aquí estamos (espero que esta "aventura" haya llegado).
Pero en fin. Lo que quería decirte antes que nada mi querida Mariana es que te queremos mucho todos en mi familia.
Te queremos de hecho desde antes de que nacieras por el gran cariño que le tenemos a nuestros compadres, que por cierto, somos compadres desde antes de que tuviéramos hijos.
Como verás quererse sin conocerse es posible.
Como son posibles muchas cosas en esta vida que creíamos que no lo eran, son como milagros terrenales.
Pero no se logran solos. Hay que soñarlos, imaginarlos, quererlos, abrazarlos, como dice una amiga "que tus deseos se conviertan en propósitos", y luego "nada más" llevarlos a cabo "y ya".
Hace algunas semanas, el día de Santa Teresa de Jesús, que no sé cuando es, estando en misa, el padre habló de ella en el sermón y me acordé muchísimo de tí.
El padre dijo: "a Santa Teresa no se le reconoce por algo grandioso que haya hecho, lo único que hizo fué hacer bien las cosas todos los días", eso si que es extraordinario.
El sentimiento de cariño que sentimos por tí se ha expandido a admiración y respeto, entre muchos otros calificativos.
Eres un ejemplo de constancia, tenacidad, inteligencia y amor.
Tienes mucha razón, el secreto de la vida es vivirla.
Mariana, aunque a veces puede parecer que "no estamos", siempre estamos.
Todos los días estás en nuestras oraciones.
Andrea y Rafa constantemente nos preguntan por tí.
Nos enteramos de tus avances en salud con los impecables y exactos resumenes de Gaby.
Nos enteramos de tus sentimientos a través de tus escritos que Martín nos hace favor de re-enviar (del blog a algo más "normal" como el mail).
Nos enteramos de tus "descubrimientos de la vida" y nos encanta tu madurez e inteligencia.
Te mandamos un beso y un abrazo muy cariñoso. Bienvenida a casa.
Andrea, Rafa, Laura y Rafa.
Parte de este atraso, aunque no quisiera que suene a justificante, es que también pretendía escribirte en el blog, pero le buscaba y buscaba y nada, se me hizo más difícil que un exámen final de química del algún año de secundaria. Bueno tu como excentaste todos, no entenderás a que me refiero.
Hoy me mando mi compadre "unas instrucciones" para escribirte al blog y finalmente aquí estamos (espero que esta "aventura" haya llegado).
Pero en fin. Lo que quería decirte antes que nada mi querida Mariana es que te queremos mucho todos en mi familia.
Te queremos de hecho desde antes de que nacieras por el gran cariño que le tenemos a nuestros compadres, que por cierto, somos compadres desde antes de que tuviéramos hijos.
Como verás quererse sin conocerse es posible.
Como son posibles muchas cosas en esta vida que creíamos que no lo eran, son como milagros terrenales.
Pero no se logran solos. Hay que soñarlos, imaginarlos, quererlos, abrazarlos, como dice una amiga "que tus deseos se conviertan en propósitos", y luego "nada más" llevarlos a cabo "y ya".
Hace algunas semanas, el día de Santa Teresa de Jesús, que no sé cuando es, estando en misa, el padre habló de ella en el sermón y me acordé muchísimo de tí.
El padre dijo: "a Santa Teresa no se le reconoce por algo grandioso que haya hecho, lo único que hizo fué hacer bien las cosas todos los días", eso si que es extraordinario.
El sentimiento de cariño que sentimos por tí se ha expandido a admiración y respeto, entre muchos otros calificativos.
Eres un ejemplo de constancia, tenacidad, inteligencia y amor.
Tienes mucha razón, el secreto de la vida es vivirla.
Mariana, aunque a veces puede parecer que "no estamos", siempre estamos.
Todos los días estás en nuestras oraciones.
Andrea y Rafa constantemente nos preguntan por tí.
Nos enteramos de tus avances en salud con los impecables y exactos resumenes de Gaby.
Nos enteramos de tus sentimientos a través de tus escritos que Martín nos hace favor de re-enviar (del blog a algo más "normal" como el mail).
Nos enteramos de tus "descubrimientos de la vida" y nos encanta tu madurez e inteligencia.
Te mandamos un beso y un abrazo muy cariñoso. Bienvenida a casa.
Andrea, Rafa, Laura y Rafa.
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