Gracias por mover nuestro corazón

Hola Mariana:
Antes que nada presentarme. Soy Lorena Barquín, alumna, "socia" (en el libro de Ética y Valores I y II ¿lo recuerdas?) y sobretodo amiga de tu papá.
Cuando tu papá nos invitaba a leerte y escribirte lo primero que pensé fue, ¿para qué querrá Mariana que le escriba gente que ni conoce? Pero me quedé pensando un rato más y me pregunté: ¿tengo algo que decirle? Y encontré que sí, que quiero decirte dos cosas.
La primera es que, cuando me enteré que te habían detectado los tumores y que te iban a operar, lo primero que me vino a la mente fue pedirle a mi mamá que te cuidara mucho y que interviniera mucho por ti. Mi mamá murió hace 5 meses y era una super mamá. Ella siempre estaba preocupada por los demás haciendo todo lo posible por ayudarlos, especialmente por evitarles el dolor y el sufrimiento. Pensé y sigo pensando que, si era así en la tierra, cómo será en el cielo ahora que tiene enchufe directo con Dios. Le sigo pidiendo su intervención para tu pronta recuperación. Creeme, estás en buenas manos.
Y la otra cosa que quería decirte es: gracias. Seguramente no soy la primera persona que lo hace y probablemente haya momentos en los que te cueste entenderlo, pero no cabe duda que has movido corazones de muchísimas personas, muchas de ellas que ni conoces, pero que a través de tu familia y amigos sabemos de ti y de tu testimonio  y podemos ver la vida con ojos más de Dios. Dentro del dolor y el sufrimiento vale la pena reconocer que se han movido corazones y solidaridades, y que esto nos hace un poco más humanos. Gracias por esto.
Sigue luchando.
Con cariño
Lorena