viernes, septiembre 25, 2009

De Enrique

Hola, Mariana.
Te escribo de rapidín para saludar. Aquí me la he pasado leyendo una tonelada en websites médicos sobre la operación y la recuperación y en lugar de eso pues mejor te saludo.

Déjame decirte que de algo ha servido tanto leer sobre tu operación: me ha quedado muy claro lo difícil y aparentemente lento (desde tu perspectiva) del proceso. Eres mi Chanoc (si no sabes quién es Chanoc pregúntale a tus papás!). Se necesita muchísima fuerza, disciplina y carácter para irse recuperando como lo estás haciendo y sobre todo con la actitud tan positiva que nos mantiene a todos pensando positivamente. Y además se necesita mucha fuerza, disciplina y carácter. Y fuerza, disciplina y carácter. Y también FDC (fuerza, disciplina y carácter).

Si me clavo con lo de la fuerza, disciplina y carácter es porque siento que esas son tres cosas que me están haciendo mucha falta últimamente (además de Prozac). En la chamba las cosas últimamente no son miel sobre hojuelas y dan muchas ganas de quedarse aplastado y no ir a trabajar. O de sacarle la vuelta a las cosas más difíciles o delegarle a alguien algo que sé que yo debería hacer. De eso dan ganas. Pero cuando siento esas ganas pienso en lo que estás pasando tú. Y me levanto y me pongo las pilas.

Además de la chamba, en Junio decidí meterme a un maratón. El maratón es en enero. Y la neta es que me gusta hacer ejercicio.Pero una cosa es hacer ejercicio y otra es entrenar para un maratón. Al principio todo muy bien, pero ahora que tengo que correr muchos más kilómetros de los que estoy acostumbrado la neta que no lo estoy disfrutando. Es como si estuviera entrenando para un pinche maratón..Pero de nuevo, pienso en tu recuperación y me pongo las pilas. Y me pongo las pilas porque me acuerdo de que la salud se evapora en un segundo. Así que corro los kilómetros por tí. Doy los pasos rápidos que tú te esfuerzas tanto en poder volver a dar. Que quede claro que no estoy prometiendo que voy a correr el maratón y a dedicártelo porque igual y mañana me quedo cucho con una lesión, con eso de que tengo 40 años y que cada vez que subo el kilometraje me duelen más las patas. Y las rodillas. Y las pompas. Y la espalda..pero si lo llego a correr seguro que va por tí.

Pos un beso muy grande y sigue siendo una buena, paciente, paciente. Unos meses de recuperación no son nada comparados con las décadas de salud que te quedan por delante.

Nos vemos en diciembre,
Kike.

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